He renunciado a luchar contra el mito indestructible del inglés. Da igual dónde salga el tema y con quién le toque a uno discutir. Lo hablen bien, mal o regular, lleven diez, doce o quince años aprendiéndolo, tengan un acento perfecto o entonen como buenamente puedan: nadie sale de sus trece, más allá de la "puntualización" de "sí, es cierto, la fonética es una pega".
La verdad es que no he renunciado, pero estoy cerca. Lo que hago ahora, en vez de indignarme cuando les oigo decir "hombre, hablamos inglés porque es la lengua más fácil", es disfrutar de las maravillas del idioma internacional.
Conoces a una chica de madre griega y padre ecuatoriano. Hasta donde tú sabes, habla español, inglés, alemán y griego. Nivel de griego desconocido. Español perfecto, acento ecuatoriano. Alemán estupendo, sobre todo comparado con el de uno mismo. Inglés bien, normal, como todos. Alguien le pregunta, sorprendido por el dominio considerable de varias lenguas, que cuál de ellas habla mejor. A la chavala se le ocurre decir que lo que mejor habla es inglés. ¿Nos hemos vuelto locos? ¿Tan distorsionado está todo que una persona no es capaz de ver que hablando español pasa por nativa y hablando inglés no?
Extrañada, se me ocurre comentarle que su español es perfecto, incluso mejor que su inglés, según mi apreciación. A lo que contesta: "sí, bueno, por el acento". Sí, hija, sí. Por ese detalle del acento, y por ese otro de decir las cosas directamente, sin tener que buscar una palabra que te sepas.
Uno considera que sabe hablar inglés cuando puede explicar lo que quiera en inglés. Poder explicar cualquier cosa está muy bien, no es poco. El problema es que, entre poder explicar lo que quieras, y poder explicarlo como quieras, hay un paso grande.
En la lengua internacional el matiz no existe. Las cosas se explican como buenamente se pueden explicar. Tampoco existe el juego de palabras, ni el chiste complicado. Todo se convierte en primario. Da igual del tema que se hable, ya digo que se puede hablar de cualquier cosa. El problema es hablamos como si tuviéramos cinco años.
Y el asunto no queda ahí, en escasez de recursos. Esa es la parte de lo que uno no sabe decir. Luego está la parte de lo que uno en teoría sabe decir, pero que, en el intento de hablar con fluidez, también dice mal de vez en cuando. Una conjugación de la tercera persona del singular por aquí, un "people is" por acá, un "much" en vez de un "many" por allá. Cosas realmente fáciles. Pero mira, tonto que es uno.
Normalmente no eres consciente. Ves a universitarios que saben varios idiomas comunicándose entre ellos en una lengua que no es la de ninguno de los dos, y consiguiendo entenderse, que no está nada mal. Pero si uno tradujera a su idioma lo que se está diciendo... todos pareceríamos gilipollas. O niños de cinco años.
Aquel día de lo Oktober se me ocurrió preguntarle al americano que qué pensaban ellos al pasarse el día oyendo a gente hablar su idioma mal. No sé, imaginaros vivir rodeados de gente que habla una especie de pseudoespañol... Pues el tío me dijo que bien, que no había problema, que esa era la grandeza del inglés, que uno podía hablarlo como quisiera y no estaba mal hablado, que la gracia estaba precisamente en que cada uno lo hablara de su forma particular.
Y una mierda. No me lo creo. No me creo que americanos, ingleses y australianos no se partan de risa cuando se juntan, viendo a medio mundo chapurrear mientras dicen convencidísimos que no hay lengua más fácil. Yo desde luego me partiría. Pero me alegro de que no nos haya tocado. Por los pelos, por cierto, porque el nuestro también debe ser fácil, lo habla un montón de gente.
Por mi parte, el día que entienda un capítulo de House entero, consideraré que sé inglés. Hasta entonces aquí estamos.
lunes, 27 de octubre de 2008
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4 comentarios:
Jo, al ver el título del post pensaba que trataría sobre una reciente liberación personal con respecto al contenido de tu blog.
For true, I am totallly of deal with you in this theme.
Jajaja, lo de la liberación tengo que pensármelo... Pero creo que acabaré cayendo.
Felicidades, Dani, tienes un inglés con estilo particular estupendo, caerás muy bien así. xD
ei, doncs jo he tingut una grata alegria en comprovar que hi ha gent que sí, que diu que l'anglès és difícil! clar que aquests ho solen acompanyar d'un "és que a mi els idiomes...". a mi m'agradaria que s'apuntessin a una altra llengua i veiessin que poca és seu el problema!
Pues aquí todo el mundo dice que es sencillísimo. Que qué suerte que tenemos de que los mismos que gobiernan el mundo tengan la lengua más fácil. Pero claro, luego si tienen que decirte algo sutil como "éste es que habrás visto que a veces se contradice el solo y se lía mientras habla" en lugar de eso te dicen "this guy thinks bad. He has problems talking".
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